La crisis de Red Bull cada vez es más profunda. A pesar de que la denuncia de una trabajadora a Christian Horner, director del equipo, por "comportamiento inapropiado" no prosperó, ha abierto una gran brecha entre Max Verstappen y la cúpula de la escudería.

Este viernes, durante la clasificación del Gran Premio de Arabia Saudí, Helmut Marko, asesor de Red Bull, compareció ante los medios de comunicación y aseguró que "existe la posibilidad de que sea apartado del equipo".

Verstappen no ha tardado en reaccionar, y su entorno ha filtrado en las últimas horas a varios medios neerlandeses que, en caso de que Marko abandone Red Bull, el tricampeón del mundo también saldría del equipo de las bebidas energéticas.

Esto ha provocado que su nombre se vincule a Mercedes, que tiene un asiento libre de cara a 2025 tras la marcha de Lewis Hamilton a Ferrari. Tras el Gran Premio de Arabia Saudí, Toto Wolff, jefe de Mercedes, fue preguntado al respecto, y confesó que el interés por incorporar a Max Verstappen es real.

"Me encantaría contar con él", admitió Toto Wolff, aunque asegura que, para convencerle, primero tienen que mejorar el rendimiento del Mercedes.

"Pero primero tenemos que mejorar nuestro monoplaza. Creo que se lo debemos a nuestros pilotos George Russell y Lewis Hamilton, tenemos que darles un paquete que sea bueno, antes de soñar con el futuro", dijo Wolff para concluir.