La Fórmula 1 sufre un nuevo revés. El Mundial, previsto ya en noviembre con 23 carreras, está sufriendo ya sus primeros contratiempos, y es que con el comienzo en Australia en el aire ahora es el GP de China la prueba que ha pedido el aplazamiento.
La carrera en Shanghái fue, en 2020, la primera en ser cancelada por la pandemia del coronavirus. La primera de doce, que hicieron que el Mundial fuera más que atípico y que armar un calendario resultase un rompecabezas que, al final, lograron resolver.
Ahora parece que van a tener otro, pues China, tercera carrera del año, ha pedido el aplazamiento.
"Hemos hablado con la F1 durante casi todas las semanas. A pesar de que en el calendario está puesto como de costumbre, es muy dudoso que pueda celebrarse en la primera mitad del año. Queremos cambiarla a la segunda mitad y ya hemos presentado formalmente dicha solicitud", afirmó Yibin Yang, gerente general del promotor de la carrera.
Esta prueba, prevista para el 11 de abril, dejaría en ese mes otro hueco libre, pues el 25 está sin carrera tras descartar la prueba del GP de Vietnam.
Ante eso, podrían volver en 2021 las carreras del GP de Portugal en Portimao y la del GP de San Marino en Imola. Ambos trazados están listos por si tuvieran que aparecer en el calendario.
Según informa 'Motorsport.com', el plan pasa por que sea Portimao con el GP de Portugal la prueba que se dispute el 11 de abril, mientras que Imola se iría al 25.
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