La tensión entre Mercedes y Red Bull no cesa a pesar del parón veraniego en la Fórmula 1. La guerra entre Lewis Hamilton y Max Verstappen es total en medio de la lucha por el campeonato. Y unas declaraciones del inglés han vuelto a poner el tema en primer plano.

"Creo que durante este descanso la gente tiene que mirar las cosas que se han dicho, porque son inaceptables", ha afirmado el siete veces campeón del mundo en declaraciones que recoge 'As'.

Y continúa, recordando que Red Bull ha despedido a un empleado por insultos racistas hacia él: "Acaban de tener que despedir a alguien por cosas que se han dicho por ello, y no sé de quién se trataba. Pero no importa. Si se lo paso a mi amigo o a mi padre o a mi hermano, todos sentimos ese dolor de lo que quisieron decir con las palabras".

"El mundo está cambiando, y tenemos que seguir siendo positivos. Estoy muy orgulloso de mi equipo por haber permanecido tan centrado durante este tiempo, porque ha sido un torbellino de emociones y de cosas que nos han llegado en todas las direcciones", ha expresado.

Será difícil de olvidar para las dos escuderías lo ocurrido en Silverstone, donde Max Verstappen terminó contra el muro. Desde entonces la tensión es total y parece que no vaya a disminuir... a pesar del parón veraniego.