Lewis Hamilton es, junto a Michael Schumacher, el piloto que más Mundiales ha ganado. El que más ha logrado en la F1. El gran ganador de todos los tiempos. Sin embargo, en Mercedes no solo saben cómo es cuando logra la victoria, sino también cómo es él cuando pierde. Cuando tropieza. Cuando las cosas no salen como deben salir.

Como se espera que salgan. Y eso es algo que también pasa. Algo que hay que saber llevar y con lo que se debe convivir. En esas, en la marca de la estrella saben que también Hamilton sale ganando en comparación con los demás.

Así lo ha dicho Andrew Shovlin, ingeniero jefe de la escudería, quien lleva trabajando con Lewis desde que en 2013 vistiese el plata.

El ingeniero cuenta cómo es en la derrota: "Es mejor perdiendo que la mayoría de los que he visto. Va con diligencia, y trabaja para entender dónde falló y perdió sus opciones".

"Todo se trata del resultado de la próxima carrera. No sobre si sonríe o sobre si tiene bonitas palabras en una entrevista", insiste.

Y lo explica: "Me impresiona su ética de trabajo y su deseo de seguir evolucionando. Tiene pocos días malos, y en un mal día es tan bueno como la mayoría de sus oponentes".

"Eso es lo que le hace ser sobresaliente. En forma, en plena forma, su nivel es extraordinario", sentencia.