Casi una semana ha pasado. Casi siete días han transcurrido desde ese milagro de Fernando Alonso en Brasil. Desde esa carrera en la que, aún no se sabe cómo, el asturiano se subió al podio después de aguantar durante 15 vueltas a un Red Bull con DRS tras él. Después de que, en la última vuelta, le recuperase su posición. Después de que el bicampeón dejara boquiabierto al mundo de la F1.

Y es que era lo que necesitaba Aston Martin. Lo que precisaba un equipo que llevaba semanas en un túnel oscuro que, parece ser, por fin se ha terminado. Uno del que han salido, con un fin de semana en Brasil en el que tanto Stroll como Alonso tuvieron el ritmo que en su día mostraron.

Mike Krack, su jefe, sigue todavía hablando de la proeza que Fernando Alonso, que su piloto, realizó en Interlagos.

"Demostró el gran piloto que siempre ha sido", cuenta el de Luxemburgo en palabras que recogen en 'GPFans'.

"En esas últimas vueltas..."

Y sigue: "Pilotó con gran inteligencia y habilidad".

"En esas últimas vueltas mostró al mundo el gran piloto que ha sido siempre", concluye sobre Alonso.

Ahora, optimismo en las carreras que restan para acabar el Mundial: "Estamos trabajando para cerrar la diferencia con los equipos que nos preceden".

"Estamos concentrados al cien por cien en todo lo que podamos en estas dos carreras que faltan", sentencia.