Fernando Alonso sigue sorprendiendo a todos. Incluso a aquellos con los que trabaja codo a codo día tras día. Porque ni en Aston Martin saben cómo lo hace. Porque ni ellos mismos entienden cómo saca el bicampeón rendimiento de donde hay lo que hay en comparación con el resto de equipos de F1. No, no están para ser octavos. Tampoco sextos, como en Bakú. Pero con el asturiano lo imposible se vuelve, simplemente, difícil.
Y lo saben. Saben que si es capaz de hacer lo que hace con lo que tiene a saber lo que podría conseguir con algo más. Con algo mejor. Con un monoplaza que Alonso demanda al entender que lo de Azerbaiyán y Marina Bay no es ni debe ser la norma. Es una excepción, y lo que viene va a ser duro.
De momento, eso sí, toca celebrar esos cuatro puntos que Fernando ha llevado a Silverstone gracias a su increíble octavo en Marina Bay. Todo, gracias a una clasificación tan perfecta que es, usando la palabra de la mejor forma posible, hasta absurda.
"Debemos encontrar rendimiento"
Lo tiene claro Mike Krack, su jefe en Aston Martin: "Esos cuatro puntos de Alonso son una recompensa más que se gana con esfuerzo. Con una clasificación impresionante y una carrera de resistencia".
"Muy buenos puntos, en estas semanas con carreras en Azerbaiyán y en Singapur", prosigue un Krack que sabe que ahora tienen tiempo hasta Austin.
Un tiempo que deben usar para hacer más: "Debemos encontrar más rendimiento para las seis carreras que quedan en el Mundial".
"Se ha visto una impresionante prueba de desempeño. Los pilotos han completado estas 62 vueltas con una gran humedad, sin descanso y temperaturas de más de 30 grados", sentencia en la web de Aston Martin.