Fernando Alonso parece vivir una segunda juventud en la Fórmula 1. A sus 41 años ha recuperado la sonrisa y sus opciones de ganar carreras: ya son cinco podios en las seis primeras carreras con el Aston Martin. Y en Barcelona puede lograr el sexto (tendrá que remontar desde la octava posición).

Stefano Domenicali, CEO de la Fórmula 1, ha dicho en 'AS' que espera que Alonso se quede muchos años: "Me gustaría verle muchos, muchos años. A este nivel puede pilotar y ser decisivo durante muchos años. Tiene que tomar él la decisión, pero yo le quiero tanto tiempo como pueda".

Y celebra que vuelva a tener un coche competitivo en la Fórmula 1: "Es cierto que aunque seas campeón necesitas un coche que te permita mostrar ese potencial. Siempre ha sido así en la F1".

"Ahora puede luchar por el podio. Estoy seguro de que empuja al equipo para asegurarse de que puede luchar por la victoria, ha sido muy consistente en las primeras carreras de la temporada. Estará ahí hasta el final para ganar", ha expresado el dirigente de la competición.

Preguntado sobre si le preocupa que en el futuro falte ese talento y ese carácter una vez que se marche Alonso, lanza más elogios al asturiano: "Fernando tiene algo especial, seguro, pero si podemos identificar un área sin problemas en la Fórmula 1 es la cantidad y calidad de pilotos. Participan en el crecimiento del deporte. Yo estaré contento si Fernando quiere seguir".

La locura con Alonso es total. Se está demostrando en Montmeló. La afición está loca con él y también con los mecánicos 'zanahorios', que se han convertido en un fenómeno de masas en el paddock.

Quería ver a los Phillies con su mascota

Surrealista: un aficionado intenta entrar a un campo de béisbol... ¡con un caimán!

Con su correa, paseando con su mascota por Filadelfia. Hasta aquí todo normal, salvo porque el animal de cuestión se trataba de un caimán y porque, con él, trató de acceder al estadio de los Phillies.