Curioso resulta escuchar a Toto Wolff, jefe de Mercedes, hablar de la gran diferencia que existe entre los equipos de la Fórmula 1. Curioso sabiendo que su equipo, desde el comienzo de la era híbrida, ha dominado sin prácticamente rival posible desde 2014 hasta un 2021 en el que Red Bull y Max Verstappen les derrotaron el Mundial de pilotos.

Ahora, con las nuevas normas, los de la estrella no están de momento en disposición de pelear de tú a tú con los de las bebidas energéticas y tampoco para plantar cara a Ferrari salvo que algo suceda. Además, están sufriendo de manera desmedida el 'porpoising', el llamado efecto rebote que hace que los pilotos y los coches boten en la pista.

Por ello, y al hablar de las carreras al sprint de la Fórmula 1 que se llevan realizando desde el pasado año, Wolff cree que si son "menos divertidas" es por la gran diferencia que hay entre coches.

"La razón de que las carreras son menos divertidas es porque hay demasiada diferencia de rendimiento entre los equipos", cuenta Wolff.

Y explica: "Si Verstappen desaparece en la distancia tan solo quedan los dos Ferrari para dar espectáculo".

"Los demás estamos en medio de la nada. En tierra de nadie. Nunca se puede hacer una buena carrera al sprint", relata el jefazo de Mercedes.

Curioso es que sea Mercedes quien hable de "demasiada diferencia" entre equipos, viendo la gran superioridad que tenían ellos hasta el pasado año en unos Mundiales en el que las poles, las victorias y los títulos quedaban repartidos entre, salvo rara excepción, sus pilotos.

Hamilton, Rosberg y Bottas, en menor medida, vieron cómo sus estadísticas en F1 mejoraban notablemente en el monoplaza alemán, que hizo un gran trabajo con un motor prácticamente imbatible.

Ahora todo ha cambiado, con Red Bull y con Ferrari marcando 'tendencia' y con un equipo Mercedes aún 'en construcción'.