Lo decía Fernando Alonso tras el Gran Premio de Arabia Saudí y llevaba toda la razón: el increíble salto que ha dado Aston Martin este pasado invierno antes de la segunda temporada de un nuevo reglamentono se había visto nunca antes en la Fórmula 1.

Comparando su ritmo de carrera entre la carrera en Jeddah de 2022 y esta de 2023, la escudería de Silverstone ha ganado más de tres segundos, lo que es una auténtica barbaridad en un deporte que se mide en milésimas.

Según publica el portal especializado 'Formula Stat Analysis', el equipo verde le saca más del doble de ventaja a la segunda escudería que más ha mejorado, Williams, que por otra parte fue última en 2022 y por ello gozaron del tiempo máximo en el túnel de viento.

Llama poderosamente la atención el inexistente avance de Ferrari, que apenas ha ganado una centésima de segundo con respecto al GP de Arabia Saudí del año pasado.

Dentro de la cabeza de parrilla, Mercedes ha conseguido una ventaja de poco más de un segundo, mientras que Red Bull se ha quedado en -0.91.

Alpine, exequipo de Fernando Alonso, ha ganado 1.15 segundos, dos menos que Aston Martin. Viendo estos datos, ahora se entiende por qué el bicampeón de Fórmula 1 decidió dejar Enstone el pasado mes de agosto. El trabajo de los 'gurús' de Silverstoneestá dando sus frutos antes de lo esperado.