Una vez finalizado el Gran Premio de Arabia Saudí no paso por desapercibida la imagen que dejaron Fernando Alonso, Max Verstappen y Sergio Pérez.

Al igual que enBarhein, los tres pilotos consiguieron ocupar el podio, y por lo tanto, coincidieron en la sala de rehidratación durante varios minutos para compartir sensaciones de la carrera. Sin embargo, los de Red Bull transmitieron rivalidad y tensión, mientras que Fernando Alonso tenía alegría y satisfacción.

En ese tiempo, Max Verstappen ocupó la silla del ganador que le pertenecía en esta carrera a su compañero, Sergio Pérez. El mexicano no pareció molestarse en ese momento, pero es significativo que el piloto neerlandés quiere asumir el protagonismo y restarle importancia a las hazañas de su compañero. El bicampeón de Red Bull ya intentó quedar por encima suya en el final de carrera realizando la vuelta rápida para ser líder, y lo volvió a hacer fuera de la pista.

Mientras tanto, Fernando Alonso, sigue a lo suyo en su objetivo de competir contra todos y ser el mejor del resto. Cuando Max Verstappen ocupaba el lugar de su compañero, Fernando Alonso se sentó en la silla correspondiente al número uno, el del neerlandés.

La imagen es más significativa de lo que parece en el momento en el que Fernando Alonso consigue su podio número 100 y la situación se pone tensa en Red Bull. Todo hace indicar que estos pilotos volverán a dejar momentos similares en las próximas carreras.