Lewis Hamilton ya está en la cima de la Fórmula 1 junto a Michael Schumacher. El inglés, en Turquía, ha hecho lo que debía para ganar el que es su séptimo Mundial e igualar al legendario Kaiser en la más grande competición de monoplazas del mundo.

En Turquía ganó, y eso que arrancaba sexto tras una clasificación dura en una pista complicada como es la otomana. El inglés, tras una salida complicada con muchos coches, agua y trompos, salió indemne mientras que Bottas, su compañero, comenzó con su particular 'vía crucis'.

Porque Lewis y Valtteri, con el mismo coche, son como el día y la noche. Hamilton se cocinó la carrera a fuego lento, sabedor que la pista iría a mejor y que cuanto más mejorase los Racing Point irían hacia atrás. Max Verstappen, por su parte, tampoco disfrutó demasiado en Istanbul Park.

Líder, con unas gomas que llevaban ya no pocas vueltas, Hamilton tiró y tiró tan fuerte que llegó incluso a doblar a Bottas. El finlandés no tuvo problema mecánico alguno, pero se dedicó a patinar en pista y a cometer error tras error. Así pues, Lewis venció y celebró un nuevo Mundial con otro triunfo más.

Siete títulos en catorce temporadas en F1

Y es que los números del británico son, sencillamente, espectaculares. Ya no solo en temas de victorias, de poles, de vueltas rápidas... sino en simplemente comprobar que gana uno de cada dos Mundiales haciendo la media de títulos.

Porque lleva siete. Siete en 14 temporadas. Siete desde que, en 2007, debutara con McLaren y estuviera muy cerca incluso de conquistar el título en el año de su debut. El desastre de gestión de Woking, en un 'gallinero' con él y Fernando Alonso, privó a ambos de sumar el Mundial.

En 2008 ya sí llegó el primero, en aquella mítica secuencia de Felipe Massa celebrando mientras Hamilton pasaba a Timo Glock en la última vuelta en Brasil. Y ya, sequía hasta Mercedes.

Mercedes, o ganar, ganar, ganar y volver a ganar

El dominio de los de la estrella en esta era híbrida le ha dado a Lewis las alas que necesitaba para terminar con Red Bull. Desde el comienzo de los v6, Mercedes no ha hecho otra cosa que ganar.

Ganar en constructores y también en pilotos. Lewis Hamilton lo ha ganado absolutamente todo salvo el título de 2016, que cayó en manos de Nico Rosberg. El alemán se retiró en cuanto logró el Mundial.

En estas cuatro últimas temporadas, y con Bottas de compañero, tan solo Ferrari y Sebastian Vettel se aproximaron al nivel de Mercedes, sobre todo en 2017 y en 2018. Sin embargo, el teutón no pudo mantener la regularidad en la segunda mitad del curos y también sucumbió ante Hamilton.

Ahora, ¿a por el octavo?

Así pues, Lewis ya tiene siete Mundiales. El octavo dependerá de si sigue o si no en la F1 el próximo año, pues aún no ha renovado, y de si lo hace con Mercedes.

Con el cambio de reglas pospuesto a 2022, el próximo curso todo debería ser igual a este y las diferencias entre Mercedes y el resto deberían ser las mismas.

Ser octocampeón, ser el más grande de todos los tiempos de la F1 en cuanto a títulos ganados, está al alcance de Lewis Hamilton.

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