Carlos Sainz se crece bajo la lluvia. Lo ha demostrado en multitud de ocasiones y este sábado lo ha reafirmado tanto en la clasificación 'shootout' como en la carrera al sprint del Gran Premio de Bélgica con un adelantamiento magistral sobre 'Checo' Pérez.

El piloto de Red Bull había recibido un toque de Lewis Hamilton la vuelta anterior, y Sainz olió sangre. El madrileño se acercó en la recta de meta y se preparó la jugada en la llegada a la curva 1, obligando a Pérez a salir más lento.

En la bajada hacia Eau Rouge, el madrileño salió de la aspiración del Red Bull y pasó al ataque, llegando en paralelo a la mítica curva. Sainz demostró que no tenía ninguna intención de levantar el pie del acelerador, lo que obligó a Pérez a ceder la posición.

La acción le valió para situarse en la quinta posición, que se convierte en un meritorio cuarto puesto al aplicarse la sanción de cinco segundos a Lewis Hamilton por el toque previo con Pérez. Sin duda, Carlos Sainz, que ha acabado justo por delante de Charles Leclerc, ha vuelto a dar un puñetazo sobre la mesa para demostrar que quiere ser el líder de Ferrari.