Ferrari presentó ayer su balance económico del año 2022 como compañía, unos resultados que fueron muy positivos para la empresa italiana, pero que no satisfacen del todo al máximo mandatario, Benedetto Vigna, si no consigue un éxito deportivo en la Fórmula 1.

Vigna, CEO de Ferrari, reportó los mejores resultados de la historia de Ferrari como empresa con un beneficio de casi 1.000 millones de euros, pero resaltó que su felicidad no es máxima hasta que no fructifique el proyecto de la Scudería en F1.

"El título debe ser el objetivo ahora, no solo el liderato del Campeonato del Mundo. Hay que mantenerlo hasta el final", sentenció.

Y para ello apoyó al nuevo jefe del equipo, Fred Vasseur, en esta pelea por ganar el Mundial: "Todo el equipo, junto a Vasseur, están trabajando sin descanso en esa dirección. Hemos demostrado que nuestra competitividad ha mejorado durante la última temporada".

Eso sí, pese a mostrarse contento con el paso adelante que dieron como equipo en 2022, no se conforma con eso: "Fue alentador para nosotros y nuestros millones de aficionados ver a nuestros pilotos en el podio. Sin embargo, quien termina segundo es el primero de los que pierden".

Y con la lección aprendida del año pasado, Vigna exigirá el Mundial de Fórmula 1 a la Scudería, ya sea con Charles Leclerc o con Carlos Sainz.