Aunque en su momento parecía una decisión arriesgada, el tiempo le ha dado la razón a Fernando Alonso con su 'mudanza' hacia Aston Martin. Allí ha logrado ocho podios. Su mejor año en la Fórmula 1 desde 2012, cuando competía por los mundiales con Ferrari.
Y el asturiano no olvida su etapa en Alpine, donde las constantes promesas nunca se cumplieron. Así lo ha dicho en 'Auto Motor Und Sport': "A diferencia de Alpine, en Aston Martin he notado una concentración extrema...".
No es la primera vez que habla de la ambición y de la concentración que vio en Alpine y la diferencia con Aston Martin. En la escudería dirigida por Lawrence Stroll la intención es ser campeones del mundo por encima de todo.
"Para este equipo, pelear constantemente en la zona delantera fue nueva experiencia y lo hicimos mejor de lo que podíamos esperar", expresa el bicampeón de la F1.
"Después de México entendimos mejor las cosas. Estos coches son más difíciles de conducir porque el 'feedback' del piloto ya no es tan clara. A veces, el equilibrio del coche no encaja y eres tercero, otras veces te sientes cómodo con el coche y aterrizas decimocuarto", expresa el asturiano.
