Fernando Alonsoes el ejemplo de un deportista que compite al límite, respetando a sus rivales con deportividad. Pero en ocasiones el asturiano también ha demostrado que las bromas también forman parte del camino para llegar al éxito.

Lejos quedan los tiempos de McLaren-Honda en los que el ovetense transmitía sensaciones negativas y se negaba a dar un pronóstico conformándose con finalizar la carrera.

Un ejemplo de ello, es lo que se vivió ayer en su llegada a Arabia Saudí, cuando un niño le preguntó sobre cuál era su vuelta rápida. El bicampeón, lejos de pensar en el pasado, pienso en el futuro y dijo: "Creo que aquí, mañana".

El embajador de Aston Martin, Pedro de la Rosa, no mentía con sus palabras sobre el piloto asturiano, destacando que veía al Fernando Alonso que llegó a Ferrari en 2010.

La clasificación de este sábado dirá sí Fernando Alonso cumple con sus palabras, o este momento solo es la demostración de que vive en una nube, a la que le ha permitido subir Aston Martín. Pase lo que pase lo decisivo vendrá el domingo en la carrera.