Hasta la sesión de tarde de este sábado no se conocerán datos objetivos sobre el nivel real de las escuderías, pero en los primeros entrenamientos ya se destila qué equipos estarán al frente.

Red Bull ha empezado 2023 como terminó 2022: a fondo. Max Verstappen, sin mucho esfuerzo, se ha 'paseado' en los primeros test y la duda radica en si sus rivales se guardan algún 'as' en la manga.

En segunda línea, la sorpresa es Aston Martin. Tras lo demostrado en las primeras sesiones, desde el paddock ya se apunta a que la escudería de Silverstone podría luchar contra Mercedes e, incluso Ferrari.

De hecho, en la sesión matutina de la segunda jornada de test de pretemporada, Fernando Alonso ha igualado los registros de Carlos Sainz en el 'stint' con neumático medio.

Con un nivel de degradación similar en el desierto, tanto el asturiano como el madrileño han rodado en 38s, 39s y 40s, unas marcas más que decentes para la situación.

La duda recae en la cantidad de combustible que llevaban ambos pilotos. Por ejemplo, el jueves en su vuelta rápida, Alonso llevaba mucha gasolina por lo que, de haber llevado el depósito en modo clasificación, podría haber quedado primero.