Aston Martin salió con buen sabor de boca de Canadá tras la segunda posición de Fernando Alonso y la constatación de que el nuevo paquete de mejoras funciona... pero pudo ir aún mejor.

Primero, y más importante, por esa "falsa alarma" que privó al asturiano de apretar a Max Verstappen y sin la que probablemente habría quedado muy cerca del neerlandés, sino delante.

Después, por las condiciones climatológicas. Los primeros libres prácticamente no se disputaron y en los terceros, dada la intensa lluvia, Alonso no pudo completar sus planes.

Tal y como informa 'formu1a.uno', el bicampeón del mundo tenía en mente probar "una configuración más experimental con la suspensión", pero las características extremas de la pista lo imposibilitaron.

Tras la carrera, el propio Fernando reconoció que Aston Martin aún no conoce el potencial total de su nuevo paquete de mejoras, que incluye un suelo nuevo.

"Todavía tenemos que entender y optimizar un poco el paquete y en Austria, obviamente con el sprint, solo tendremos la FP1 para hacer eso", señaló.

"Pero sí, es lo que hay. El circuito será bueno y quizás también mejor para el paquete este con un diseño extraño, digamos", añadió.

Cabe recordar que Fernando Alonso es un maestro en términos de reglajes. En Alpine, Ocon tuvo que 'copiar' lo suyos al tener un déficit de ritmo manifiesto, y en Aston Martin se ha repetido el caso con Lance Stroll.