"Nos quedamos en pista, nos quedamos en pista...". Este mensaje de Karel Loos, ingeniero de Fernando Alonso, hizo dudar al asturiano en la carrera de Bakú. "Ay... no, por favor...", reaccionó el piloto.

Era un momento de la carrera en la que Alonso tenía los neumáticos duros y dudaba si podría llegar al final: "Creo que no llegaré al final siguiendo el plan A".

Pero su ingeniero lo tenía claro. Estaban siguiendo la estrategia adecuada: "Quédate fuera. Las ruedas están bien, la gestión también. No hay razones para pensar que no llegaremos al final"

"Ricciardo y Norris no tenían muy buen ritmo al principio, pero luego empezaron a ir más rápido...", le insistió su ingeniero. Y Alonso obedeció: "Sí, pero tienen un coche completamente diferente tío. Te lo dije, esperemos que tengas razón".

Finalmente el de Alpine no entró a boxes y sus neumáticos duros aguantaron hasta el final. Y no solo eso. Ni Daniel Ricciardo ni Lando Norris, los dos McLaren, pudieron adelantarle. Es más, su persecución dejó un comentario muy viral del asturiano.

Porque los McLaren "esperaban un error" de Alonso, pero el español tenía claro que eso no sucedería. "¿Un error? Improbable...", reaccionó en 'DAZN' al terminar la prueba.

El de Alpine terminó séptimo en Bakú, sumando su tercera carrera consecutiva puntuando. Algo ha cambiado en el equipo... y también en Alonso, que se ha mostrado muy satisfecho con el trabajo en los últimos días.