Louis Camilleri, CEO de Ferrari, ha dejado su puesto en la escudería de forma inesperada. El equipo lo anunciaba a última ahora del jueves alegando "motivos personales".
Camilleri empezó a formar parte de la junta directiva de los de Maranello desde 2015 y llegó al cargo como consejero delegado en 2018 sustituyendo a Luca di Montezemolo. Ahora será el propio presidente, John Elkann, quien ocupe su puesto hasta que encuentren un sustituto.
"Quiero expresar nuestro más sincero agradecimiento a Louis por su extraordinaria dedicación en su rol de Administrador Delegado desde 2018 y como miembro del Consejo de Administración desde 2015. Su pasión por Ferrari era infinita y, bajo su mandato, la Sociedad se ha reafirmado como una de las grandes empresas del mundo, capitalizando su patrimonio y su continua busca de la excelencia. Le deseamos a él y su familia una larga y feliz jubilación", aseguraba Elkann.
Camilleri acaba de superar la Covid-19 a sus 65 años y tras recibir el alta del hospital decidió regresar a su residencia de Nueva York para terminar de recuperarse. Poco después anunció a la escudería su intención de dejar el cargo con efecto inmediato.
"Ferrari ha formado parte de mi vida y servirla como Administrador Delegado ha sido un privilegio. Mi admiración por los extraordinarios hombres y mujeres de Maranello, por su pasión y por la dedicación en cuerpo y alma a aquello que hacen. Me siento orgulloso de los éxitos logrados por la Sociedad desde 2018 y sé que los mejores años de Ferrari están por llegar", ha confesado Camilleri.
Ahora falta por ver que pasará en la escudería. Camilleri era un firme defensor de Binotto, fue muy paciente con él y su proyecto de renovación del equipo el cual todavía no ha dado resultados. Además también fue uno de los principales valedores de la llegada de Carlos Sainz a Ferrari.
Considerado "parte activa"
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