El cruce de declaraciones entre Mercedes y Red Bull es constante. Pero Lewis Hamilton parece quererse mantener al margen en medio de su lucha por el campeonato con Max Verstappen. Lo ocurrido en Monza es el último episodio... y quizá vuelva a repetirse si la tensión continúa de esa manera.

En la rueda de prensa previa al Gran Premio de Rusia, Hamilton no ha querido saber nada de las críticas que llegan desde la escudería de las bebidas energéticas: "No escucho lo que hablan estas personas".

"Es normal que cuando un coche aterriza sobre tu cabeza sientas algún tipo de malestar. Como dije, sentí algo después de la carrera y después dije que lo revisarían", se defiende el siete veces campeón del mundo.

Además, Hamilton ha explicado cómo ha sido su trabajo de recuperación en el cuello, que fue alcanzado por la rueda trasera derecha del Red Bull: "Trabajé después de la carrera y durante el vuelo, me sometí a chequeos al día siguiente. Luego trabajamos en ello durante toda la semana con acupuntura".

Sochi podría convertirse en un nuevo escenario de la batalla que mantienen los dos pilotos favoritos al título. Y la lluvia podría convertirse en un factor crucial de cara al fin de semana. Por lo que todo podría suceder en este GP de Rusia.

Verstappen es el actual líder con cinco puntos de ventaja sobre el británico. Siete son las carreras que restan para decidir uno de los campeonatos más intensos de las últimas décadas.