Durante la presentación del SF23, el nuevo jefe de Ferrari, Fred Vasseur, defendió que al menos en el inicio de la temporada dejará luchar libremente a Carlos Sainz y Charles Leclerc. Algo que también ha celebrado el monegasco, que "comparte esa filosofía".

"Estoy de acuerdo con la filosofía, no se puede empezar el año así. Es importante para que Carlos y yo estemos motivados en la primera parte de la temporada. Si en algún momento de la temporada uno de los dos está en la pelea y puede ganar el Mundial, el equipo hará todo lo posible para que esté en la mejor condición posible", ha expresado Leclerc.

Su relación con Sainz es inmejorable: "Siempre puede ser mejor, pero no sé cómo. Compartimos muchas aficiones fuera de la pista, nos lo pasamos bien. Somos muy competitivos, aunque sea jugando al pádel. Pero es una mentalidad competitiva saludable que nos lleva más lejos".

Sobre Vasseur, el máximo mandatario de la escudería, ha tenido palabras de elogio: "Me impresionó cómo se introdujo en el equipo. Ferrari es muy diferente a lo que estamos acostumbrados, es enorme, y él lo entendió realmente pronto".

"Es muy claro en lo que quiere y es bueno llevando a la gente a la mentalidad y el ambiente adecuados para que den su mejor versión", sentenció Leclerc.

El ambiente es muy bueno en Ferrari y el optimismo, como casi cada invierno, es total. El equipo aspira a todo y ya tiene a Max Verstappen y su Red Bull en el punto de mira: "El año pasado tuvimos problemas de fiabilidad que nos costaron un poco. Este año espero que podamos aprobar más. En cuanto a gestión de neumáticos, hemos hecho un buen trabajo en invierno".