Carlos Sainz fue el primero de los mortales. Finalizó quinto en el mundial de pilotos por detrás de los Red Bull y los Mercedes. Un año brillante en su debut en Maranello por delante de su compañero de equipo, Charles Leclerc.

Precisamente el monegasco ha celebrado esa "presión" que le ha traído Sainz: "Ha sido un año fantástico, me ha presionado mucho para que intente ser más rápido en cada carrera, y ha sido muy interesante".

"Esa fue mi debilidad en 2019, mejoré mucho en 2020, y lo he vuelto a hacer en este año. Gracias a Carlos, también he mejorado", ha expresado Leclerc en declaraciones recogidas por 'Motorsport'.

Ferrari quiere mucho más. Tercer puesto en el mundial de constructores, sí, pero demasiado lejos de los dos grandes. Algo que quieren cambiar en 2022 con el nuevo reglamento de la F1, que promete mucha más igualdad en pista.

La 'Scuderia' no gana una carrera desde 2019. Y esperan un giro con las nuevas normas. Para ello son conscientes que cuentan con una gran pareja de pilotos. Una pareja que se presiona... y eso gusta mucho a Leclerc.