Charles Leclerc ha logrado esta temporada el mejor resultado de su carrera, el subcampeonato de la Fórmula 1. Sin embargo, no ha acabado contento con su temporada ya que Ferrari dominó las primeras carreras y soñaban con el título. Y el monegasco ha confesado todas las dificultades que ha vivido en 2022.

El '16' está feliz de estar en la Scudería, por ello ha renovado hasta 2024, pero ha desvelado en 'L'Equipe' que ha sufrido mucho las dos últimas temporadas: "Los dos anteriores han sido super frustrantes porque hemos luchado por posiciones que no eran las deseadas. Este año ha habido muchos altibajos desde el plano emocional. El arranque fue casi perfecto, las tres o cuatro primeras carreras fueron muy buenas".

No obstante, los problemas aparecieron para los italianos y Leclerc señala su carrera de casa como el punto de inflexión: "El Gran Premio de Mónaco fue el momento más difícil del año. No nos salieron bien las cosas, habíamos hecho la parte más difícil con la salida en lluvia, pero al tomar las decisiones equivocadas perdimos la victoria".

"Después, en la parte intermedia de la temporada, la situación se complicó debido a los problemas de motor, las penalizaciones y los fallos estratégicos, lo que se tradujo en que nunca pudimos sacar el máximo rendimiento del coche", añadió.

Tras una temporada llena de altibajos, Leclerc tiene que claro que pedirle a Ferrari para 2023: "Tenemos que mejorar la fiabilidad, la gestión de las neumáticos, la comunicación y la estrategia. Hay que cambiar el proceso para llegar a la decisión correcta".

Ahora bien, pese a todos los problemas, no duda de su futuro con la Scudería: "Aún queda tiempo que pasar en Ferrari. Estar en este equipo era mi sueño desde que era niño. Mi objetivo, de momento, es ganar con Ferrari".