Fernando Alonsoestabamás que feliz con su trofeo en Países Bajos. Con su copa. Con el premio que se llevó tras ser segundo en Zandvoort. Porque le gusta esta pista. Porque pensaba que nunca podría degustar el champán neerlandés. Pero sí, sí ha sido posible. Y ha sido así gracias a un coche, a un Aston Martin, que de nuevo ha estado cerca de llevarle a la victoria.
A ese mítico número. Al 33. Un 33, un triunfo 33, que se quedó a nada. A tres segundos de Max Verstappen. Y sí, claro que lo intentó. Claro que probó fortuna en la relanzada después de la bandera roja que salió tras el accidente de Guanyu Zhou.
Así lo ha reconocido. Así ha hablado de la charla con Mike Krack. De cómo fue su conversación con su jefe en Aston Martin.
"Sé que el segundo es valioso..."
"Le dije a Mike que si podía iba a ir a por Verstappen. Sé que el segundo es valioso para el equipo...", dice Fernando.
Y luego cuenta qué le respondió Krack: "Me dijo, 'haz lo que quieras. Te está saliendo todo".
Alonso, sin duda, atacó a Verstappen: "Lo tenía pensado. Sabía que él iría con más cuidado que yo. Tenía más que perder".
Algo sabía Fernando de adelantar en Zandvoort: "Probé la línea baja en la curva 3 en los Libres 2. Cuando vi las gotas de agua... Creo que adelanté a dos coches".
"Vuelta rápida, piloto del día..."
El asturiano, en la vuelta, ha regresado a lo grande: "Piloto del día, vuelta rápida... regreso soñado".
"Tuvimos todo concentrado en dos horas tras casi cuatro semanas sin hacer nada. Banderas rojas, amarillas, 'safety car', 'virtual safety car'. Pensé que nunca iba a ver el podio aquí. Me da mucha alegría tener este trofeo", sentencia.
