Carlos Sainz y Fernando Alonso. Sin el primero, quizá no se entendería al segundo. Y sin el segundo, a buen seguro no se entendería al primero. Eso sí, en el caso A se habla de Carlos Sainz padre y en el B de Carlos Sainz hijo. Caminos entrelazados para los dos pilotos españoles en busca de un mismo destino.

En busca de un Mundial de Fórmula 1. Fernando Alonso tiene dos. Dos que logró en Renault en las temporadas 2005 y 2006. Luego probó en McLaren, en un año en el que tan solo Ron Dennis le arrebató la gloria. Tras otros dos cursos con los franceses, lo intentó con Ferrari desde 2010 a 2014. Después, de vuelta a Woking.

Renault, McLaren y Ferrari, junto con Minardi. Esos son los equipos para los que, en Fórmula 1, pilotó el asturiano. Carlos Sainz, desde su debut en 2015 con Toro Rosso, ha corrido con Renault y McLaren, y va a correr con Ferrari a partir de 2021.

Sí, dos caminos que más que parecidos son casi idénticos. Porque donde estuvo Fernando estará Carlos, y a saber si el buen hacer de Alonso, en representación del automovilismo español, ha ayudado en esto. Ayudado, algo diferente a ser trascendental para que haya sucedido lo mismo pues de eso se ha encargado el buen hacer de Sainz.

A saber qué habría pasado con dichos pasos de no haber tenido a Max Verstappen como compañero en Toro Rosso. Sainz, a diferencia de Fernando, es producto de la factoría Red Bull, pero los austriacos tuvieron claro que su apuesta era el holandés y desde entonces, sin las bebidas energéticas, Carlos ha volado solo.

Sea como fuere, el objetivo del piloto madrileño es el mismo que el de Fernando Alonso: lograr un Mundial. Es también, y puede hacerlo, conseguirlo en el equipo que es una 'espinita clavada' para Alonso como es Ferrari. Porque una cosa es ganar un título y otra ganarlo con la escudería italiana.

Cuando el asturiano firmó por los italianos tenía ya una trayectoria más que consagrada. Dos Mundiales, victorias, podios, poles... Carlos, por su parte, llega con un podio, el logrado en Brasil 2019. Pero llega, como Alonso en su día, como un veterano aún en edad de aprendizaje capaz de sacar lo máximo de cada coche que maneja.

En la que será su séptima temporada, Carlos Sainz vestirá el siempre icónico color rojo de la legendaria marca de Ferrari. Del equipo más laureado de todos los tiempos de la Fórmula 1. ¿Podrá lograr en la 'Scuderia' lo que Fernando Alonso no pudo? Hagan sus apuestas.