Es difícil imaginar que el Gran Premio de Mónaco vivido hace escasos diez días, con victoria de Max Verstappen y segundo puesto para Carlos Sainz, sea la última carrera en el Principado, al menos, en los años venideros.

Así lo elucubran desde Inglaterra, donde el 'DailyMail' publica que Liberty Media, dueña de los derechos de la Fórmula 1, tiene que negociar con la organización del Gran Premio la renovación de un contrato que expiró con la conclusión de la carrera.

El contrato ya no vigente venía de tiempos de Bernie Ecclestone, que rubricó un acuerdo de 11 años con el Automobile Club de Mónaco (ACM).

Ahora, con el nuevo jefe del 'Gran Circo', Stefano Domenicali, es turno de renovar el contrato con el circuito.

Según el citado medio, el Principado ofrece 10 millones de libras esterlinas (unos 12 millones de euros), mientras que otros países como Arabia Saudí pagarán hasta 50 millones de libras (58 'kilos' en euros) por albergar un Gran Premio.

Tras la crisis económica devenida de la pandemia, la F1 necesita optimizar sus ingresos como sea, pero dejar fuera del calendario al lujo y embrujo de Mónaco puede ser una puñalada para los amantes del motor. Pronto deberá haber más noticias.