Aston Martin ha sorprendido a todos en 2023 mostrando con firmeza ser la segunda escudería más rápida de la Fórmula 1 con Fernando Alonso liderando al equipo. Lejos de conformarse, la ambición de los británicos les ha llevado a construir una nueva fábrica para continuar con el desarrollo del monoplaza, un proyecto que avanza a buen ritmo.

Con la inversión del dueño del equipo, Lawrence Stroll, Aston Martin se quiere desligar por completo de cualquier otro equipo. Hasta ahora, los británicos utilizaban la sede del equipo Mercedes en Brackley para la elaboración de sus monoplazas, como ha sido el caso de este exitoso AMR23 que ya ha conseguido cuatro podios.

El plan es construir una nueva sede donde empezar a dar pasos sin el soporte de otro equipo, una sede que también les daría poder de negociación con cualquier motorista, pese a la buena relación actual que tienen con Mercedes. Un plan que está llegando a su punto intermedio.

La construcción de las nuevas instalaciones de dividió en tres partes. La primera, la zona de oficinas para los trabajadores, está prácticamente completada y durante este año los empleados de Aston Martin ya podrán continuar sus labores en ella. La segunda es la más importante: el túnel de viento.

El túnel de viento es la mejor herramienta que tiene un equipo de Fórmula 1 para simular el rendimiento del coche y es fundamental tener una independiente. Los británicos siguen avanzando en la construcción de un túnel que se espera que empiece a funcionar en 2024. Eso sí, el monoplaza del año que viene también se elaborará en la sede de Mercedes y una parte del de 2025 probablemente también.

Estas instalaciones se están realizando con herramientas de última generación para colocarse en la cima de la Fórmula 1 y los británicos han querido mostrar los avances de un proyecto que sigue ilusionando.

Tras el túnel de viento, todavía les quedaría la última fase de la fábrica, la zona para albergar eventos, que por motivos obvios se ha relegado a la parte final de la construcción.