En plena época de presentaciones de monoplazas, Red Bull fue la segunda escudería en mostrar su "nuevo" coche, pero rápidamente se encargaron de aclarar que el monoplaza que saldrá a pista en los test será diferente al enseñado.

Entonces, ¿para qué hacer la presentación? Ahora, el evento se ha convertido en una acción comercial en la que el monoplaza pasa a un segundo plano. Los austriacos sacaron a la palestra el coche de 2022, Haas solo mostró una maqueta y Williams utilizará su presentación para enseñar la decoración.

"Obviamente, el coche que os hemos mostrado será algo diferente a cuando lo veáis en Bahréin. En este evento solo queríamos hablar de las aspiraciones de Red Bull y de los patrocinadores, además de la emocionante colaboración con Ford", explicó Christian Horner, jefe de Red Bull, en la presentación del coche para esta temporada.

Como es lógico, los equipos de la Fórmula 1 no quieren dar pistas a sus rivales y por ello esconden el diseño final por el que apuestan para la temporada, pero en años anteriores apostaban por estirar la fecha el máximo posible para que no hubiera demasiada diferencia con el momento que salga a pista.

Y, a diferencia de esta tendencia actual, Aston Martin apuesta por lo contrario. La escudería de Fernando Alonso es la única que ha confirmado que el coche que enseñarán en su presentación es el monoplaza real que utilizarán esta temporada.

"El monoplaza que revelaremos el 13 de febrero será el verdadero AMR23. No vamos a decepcionar a los fans", comentó Eric Blandin, jefe de aerodinámica de Aston Martin.

Lo que la lógica invita a pensar es lo que brilla por su ausencia en la actualidad. Hasta el momento, solo Aston Martin utilizará la presentación de su coche para el verdadero significado de la presentación: mostrar el coche real que competirá en pista.