Arabia Saudí. La carrera clave. El fin de semana en el que se podía ver si sí o si no. Si lo de Aston Martin fue cosa de un día o si era algo más. Si estaban preparados. Si tenían un coche completo o uno que fuese bien, muy bien, en según qué circuitos. Ahora, después de vercómo se desenvolvieron Fernando Alonso y el AMR23 en Jeddah, la conclusión es clara.

La conclusión es que han creado un 'monstruo'.Es que la marca ha elaborado un monoplaza que es una obra maestra de la ingeniería. Que no está solo para pistas de curva media y lenta, sino que en circuitos de mayor velocidad, en esos que cuentan con pocas frenadas, también están entre los mejores.

Porque Alonso, con suspense, llegó al podio. Un podio merecido. Uno que le quitaron,y que le devolvieron. Que le volvieron a dar tras la apelación de Aston Martin. Tras el gran trabajo de la escudería en los despachos. Uno que está a la par de lo que han creado en la fábrica.

Aston Martin es una realidad

Y es que el podio, al igual que su tercer puesto (segundo por la sanción a Leclerc), en clasificación no fueron fruto de la casualidad. Fueron fruto de que tienen que comenzar a creérselo. Porque son, en este comienzo de Mundial, el segundo mejor equipo del campeonato.

Eso son. Han pasado en un año de apenas poder con Williams a ser el único capaz de seguir la estela de Red Bull. Desde lejos, pero son los que más cerca están. Porque por encima de Aston Martin, por encima del AMR23, tan solo está el RB19. Porque por encima de Fernando Alonso, en el Mundial, tan solo están Max Verstappen y Sergio Pérez.

Las palabras del asturiano tras la prueba de Jeddah lo dejan claro. Tenía completamente controlados a los Mercedes y a los Ferrari. ¿Que tenía que abrir distancia? Le metía medio segundo a George Russell en apenas tres vueltas. Sus mensajes por radio, como siempre, positivos.

Solo queda Australia

Y el que dejó antes de Jeddah, a una carrera de hacerse realidad. Lo dijo, que había que esperar. Que había que esperar... hasta Australia. Ahí se sabría todo.

"Siendo realistas, no creo que sea hasta después de Australia cuando sepamos dónde está cada equipo. Cuando podamos ver el rendimiento de cada uno. Llevaremos ya tres carreras, muy diferentes entre ellas", afirma.

En lo cierto está. Curva lenta y media en Bahrein, con alta degradación de neumáticos. Curva rápida y velocidad punta en Jeddah, en pista para bajar carga aerodinámica... y luego Melbourne. Pista semiurbana, con frenadas fuertes pero con un 'pero'.

Porque la pista ha cambiado. Un poco, pero ha cambiado. Los retoques harán de Albert Park una pista en la que se van a alcanzar velocidades importantes en ciertos puntos, pero atendiendo a lo visto en Sakhir y en Jeddah el AMR23 debería ir bien.

Y es solo el coche 'base'

Sus fortalezas son claras, y será después de dicha prueba cuando ya se tenga algo más concreto sobre dónde está cada uno. Red Bull, imparable. Mercedes, mejorando. Ferrari, estancado y para atrás... y Aston Martin como segundo mejor equipo con un coche que es la 'base'.

Con uno que es el comienzo. Que seguirá mejorando, que tendrá muchas novedades. Muchas piezas nuevas... y que puede tener además como 'aliada' la reducción de túnel de viento de Red Bull para este 2023.