El buen ritmo de carrera de Alpine fue la gran sorpresa del Gran Premio de Australia.El equipo francés, que en Bahrein y Arabia Saudí sufrió para meterse en la zona de puntos y estuvo muy lejos de los cuatro equipos punteros, mostró un gran rendimiento en Albert Park.

Pierre Gasly consiguió mantenerse en la estela de Carlos Sainz durante toda la carrera conservando su quinta posición, mientras que Esteban Ocon pudo remontar desde la undécima hasta la octava posición, aunque un choque entre los dos pilotos de Alpineen la relanzada tras la segunda bandera roja tiró por tierra un buen resultado para el equipo.

A pesar de que el accidente les hizo irse de vacío de Australia, en Enstone aseguran que el rendimiento del A522 les dejó satisfechos, aunque no encuentran explicación ante un aumento de rendimiento tan significativo, especialmente en un fin de semana en el que el equipo no introdujo ninguna mejora en su monoplaza.

Mejoras para Baku e Imola

Tras concluir la carrera, Otmar Szafnauer fue preguntado por el buen desempeño de su monoplaza en el trazado australiano, pero el jefe de equipo de Alpine no pudo explicarlo. "Tenemos que investigar eso porque el coche no ha cambiado mucho en comparación con la última carrera. Tal vez hicimos la puesta a punto perfecta o progresamos con la gestión de la energía", declaró Szafnauer en palabras que recogen en 'AutoMotor und Sport'.

El equipo francés ha anunciado que en la próxima cita del mundial,el Gran Premio de Azerbaiyán, llevarásu primer paquete de mejoras, y un mes después, incorporará el segundo en el Gran Premio de Emilia Romagna. Con estas actualizaciones, Alpine espera consolidarse al frente de la zona media y mirar hacia los equipos punteros. "Desafortunadamente, es un juego de dependencias. Pero creemos que al menos podemos seguir el ritmo de desarrollo de Ferrari, Mercedes y Aston Martin", explica Szafnauer.

El accidente de Australia tendrá consecuencias

En la segunda relanzada, Pierre Gasly y Esteban Ocon colisionaron, dejando los dos coches fuera de combate. Aunque el accidente no causó daños estructurales en ninguno de los monoplazas, si los ha causado en las arcas de la escudería, ya que la restricción de presupuesto hace que cualquier reparación merme el dinero disponible para desarrollar el coche.

"Todavía no es un problema para el límite de costos, incluso si el accidente es costoso para nosotros. Pero ha cambiado las prioridades. Para Bakú, primero necesitamos piezas de repuesto. Cosas como un alerón delantero no son tan fáciles de reconstruir en dos semanas. Todavía tenemos que comprobar si eso tiene un impacto en si podemos desarrollar completamente nuestro desarrollo", ha explicado Szafnauer.