El caos en Alpine es total. Esteban Ocon y Pierre Gasly rodaron en la última parte de la tabla durante todo el Gran Premio de Bahréin. Un coche que no corre y que ni mucho menos es competitivo. Están condenados a luchar en el farolillo rojo de la parrilla.

Tras la carrera en Sakhir dos nombres importantes anunciaron su dimisión. Fueron Matt Harman y Dirk de Beer, director técnico y jefe de aerodinámica.

Alpine introduce tres nombres nuevos: Joe Burnell, David Wheater y Ciaron Pilbeam. Ellos tres harán el trabajo que antes realizaba Harman.

Con respecto a las unidades de potencia, Erick Meignan se hará cargo del proyecto a largo plazo. Centrará su trabajo en el nuevo reglamento que llega a la Fórmula 1 a partir de 2026.

"Hemos decidido hacer estos cambios organizativos porque vemos claramente que no estamos donde queremos ni necesitamos estar en cuanto a nivel de rendimiento. Y ha llegado el momento de dar un paso más en términos de organización y personal", dice el comunicado de la escudería francesa.

"La nueva estructura de tres pilares con tres directores técnicos, cada uno especializado en áreas diferentes, aportará un mejor trabajo y colaboración en todas nuestras áreas técnicas y contribuirá a ofrecer rendimiento desde las fábricas hasta la pista", sentencia la nota de Alpine.