Jorge Bautista
Madrid
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Ahora sí que sí, Fernando Alonso ya puede decir que ha debutado en el Rally Dakar. Tras confirmar su participación hace varios meses, y después de una exhaustiva preparación, el asturiano se ha subido en el Toyota para domar las dunas árabes y lo cierto es que tras su primer día puede estar más que satisfecho.

Gran debut, sin duda. Y no era ni mucho menos fácil porque, no en vano, era su primer día. Y los primeros días siempre son complicados. A pesar de eso, Alonso pudo completar sin problemas la primera etapa y, durante varios tramos, rodando incluso a la par o por delante de algunos favoritos como Carlos Sainz.

No perdió demasiado tiempo en el primer punto, aunque posteriormente se vino abajo con respeto a los cronos de los primeros. Sin embargo, comenzó su remontada para recuperar el tiempo perdido aprovechando también los problemas que tenían los demás pilotos.

Perdió tiempo en su último paso por meta, en parte también por un sorprendente Zala que terminó la etapa a un ritmo extraordinario para meterle incluso más de dos minutos a Peterhansel, uno de los favoritos.

Y es que esto es la lucha contra las dunas, contra la arena y contra la resistencia propia. También contra uno mismo, en una auténtica batalla de superación que, de momento, Fernando Alonso ha superado en el primer día tras entrar a 15 minutos del vencedor de la etapa. Su puesto, undécimo.

Carlos Sainz, brillante

Su objetivo es el de terminar y ganar experiencia en su primer año en el Rally Dakar. El de Carlos Sainz es ganarlo. Conseguir su tercer entorchado en las dunas. Su primera toma de contacto con Arabia Saudí ha sido excepcional, y eso que llegó a perder bastante tiempo por un problema en el segundo punto de control.

Sin embargo, al igual que Fernando Alonso, recuperó y remontó en los últimos tramos para pasar por el último a menos de dos minutos del líder. Al final, cruzó la meta tercero, a 36 segundos de Peterhansel y a menos de 3 minutos de Zala, pero por delante de un Al-Attiyah que llegó a sufrir tres pinchazos.