Su nombre no paramos de repetirlo. Es el Bloondhound, o desde hace unas horas, el séptimo vehículo más veloz en la historia.

Porque el coche supersónico sigue quemando etapas y ya alcanza los 806 Km/h.

Un objetivo intermedio donde no faltan los problemas puesto que la pantalla central sigue sin funcionar... y las tormentas de arenas de las últimos horas han ensuciado mucho la pista.

El objetivo sigue siendo superar los 1228 Km/h.