España podría tener en Álex Palou a su primer piloto de la historia en conquistar el automovilismo americano. El piloto catalán volvió a sumar unos puntos de oro de cara al mundial de la IndyCar a falta de solo una carrera por disputarse y los cálculos son muy favorables para convertirse en campeón.

En gran parte por su última actuación en Laguna Seca, donde acabó segundo, subiéndose al podio por segunda vez consecutiva, después de conseguir la victoria en Portland. Gracias a los cuarenta puntos que suma a su casillero, Palou está acariciando el título salvo desastre en las calles de Long Beach.

Allí solo llegan con opciones de arrebatarle el título Josef Newgarden y Patricio O'Ward. El estadounidense necesita hacer un fin de semana perfecto y que tanto Pato como Alex pierdan muchos puntos, ya que la diferencia que tiene ahora mismo con el liderato es de 48 unidades.

La máxima puntuación posible en un fin de semana en la Indy es de 55, considerando que se otorgan 50 por ganar, 1 por la pole, otro por liderar al menos una vuelta de carrera, otro más para la vuelta rápida de la prueba y dos para el que más vuelta haya estado al frente.

Teniendo en cuenta que la mínima puntuación es de 5 por acabar vigesimoquinto o peor, incluso cuando no acaban la carrera, Newgarden queda prácticamente descartado.

Clasificación IndyCar

O'Ward, no obstante, tiene alguna opción más, aunque también remota. En el caso de que Palou acabe undécimo, haga lo que haga el mexicano, será campeón. Cualquier punto extra que acumule durante el fin de semana dejando a un lado la posición final incluso ayudarían más.

Palou lo tiene en su mano incluso si hubiera empate de puntos, ya que ahora mismo el español tiene una victoria más. Incluso en el caso de que O'Ward ganara, Palou ha quedado segundo en más ocasiones también.

El único impedimento será salir vivo del circuito apodado como el 'Mónaco de América' y en el que nunca ha corrido Palou, siendo el único de la actual parrilla.

¿Qué es mejor, la F1 o la Indy?

El éxito no es tan grande mediáticamente si lo comparas con la Fórmula 1, pero sigue siendo una proeza de gran calado. Si no que se lo digan al 'rookie' con pasado en el 'Gran Circo' Romain Grosjean, quien ayer acompañó a Colton Herta y Palou en el podio tras una remontada antológica.

"Cuando recibí la ovación casi lloro y no lloro con mucha frecuencia. Ha sido más de lo que podía haber imaginado algún día", dijo emocionado para 'Autosport', acordándose de sus momentos en F1.

"Fui uno de los 20 tipos con suerte de todo el mundo que llegué a la Fórmula 1. Entiendo que muchos niños quieran llegar a la Fórmula 1. Si es para estar en la parte trasera de la parrilla cada fin de semana, creo que estás mejor aquí", confesaba el francés.

"Es por la libertad de pilotar el coche como te gusta pilotarlo. No necesitas tener cuidado con recargar, empujar, con la temperatura de los neumáticos, con la ventana de los neumáticos...", comentaba.

"Definitivamente llegar a un sitio en el que puedes luchar delante y tienes a tu ingeniero diciéndote 'eres el coche más rápido de la pista, eres primero', luchar por podios, es definitivamente un renacimiento", concluía.