En el tatami, con las manos en la cara. Sin creerse lo que acababa de ocurrir. Niko Shera llegaba a Tokio con el objetivo de convertirse en campeón olímpico, pero no pudo ser. Ni si quiera pudo luchar por la medalla de bronce, eliminado en cuartos de final.

"Estoy dolido", resumió a la conclusión. "Voy a necesitar tiempo para analizar todo lo que ha pasado, no estaba bien desde el primer momento, las sensaciones no eran las que deberían ser para todo lo que había entrenado", ha afirmado.

"Veníamos a ganar, a por la medalla. Tenía ganas de darlo todo y mi preparación era para ganar, pero no sé qué me ha pasado", ha indicado el judoca español.

"Ahora mismo no tengo ni ganas de ver un tatami, han sido años muy duros...", ha finalizado, visiblemente afectado, una de las principales opciones de oro de la delegación española.