El jugador del Arsenal Granit Xhaka está siendo investigado por un posible amaño después de que el pasado mes de diciembre, en un partido que el Arsenal iba ganando por 1-4 al Leeds, el centrocampista suizo forzara de manera absurda que el árbitro le amonestara con tarjeta amarilla. Ahora, la Agencia Nacional del crimen de Inglaterra está tratando el asunto.

Era el minuto 85 del encuentro y con el partido resuelto, Xhaka comenzó a hacer muchos amagos a la hora se sacar una falta, tardando demasiado tiempo. Fue por ello que le sacaron una tarjeta amarilla absurda que ahora podría traer consecuencias al suizo.

Y es que este absurdo acto del centrocampista podría tener un trasfondo muy profundo. Según informa 'Daily Mail', "está siendo investigada una supuesta conspiración criminal que implica a la mafia albanesa y a un exfutbolista profesional que ha sido condenado por amaño de partidos".

Todo se habría destapado después de que en Suecia se haya condenado a un exjugador sueco-albanés, Alban Jusufi, por intentar pagar 182.000 euros al portero rival para que se dejara ganar.

Al parecer, se hicieron apuestos por valor de 52.000 libras (más de 60.000 euros) a que Xhaka sería amonestado con tarjeta amarilla en dicho encuentro en los últimos 10 minutos de partido. Las apuestas las habrían hecho compañías cuya sede está en Albania y pagando con criptomonedas, según informan las autoridades británicas.

El centrocampista suizo fue titular y jugó los 90 minutos en el debut del Arsenal en la Premier League contra el Crystal Palace el pasado viernes, partido que ganaron los 'gunners' por 0-2.