Diego Ribas, capitán del Flamengo, no pudo contener las lágrimas en su primera rueda de prensa tras el trágico incendio en la academia del Flamengo y que terminó con el fallecimiento de 10 niños de entre 14 y 16 años.
"Uno de los niños del hospital me mandó una foto celebrando un gol y me dijo que yo era su inspiración...", comenzó diciendo el futbolista brasileño.
Tras esas palabras no pudo seguir y tuvo que dejar pasar unos segundos para continuar ante la emoción.
"Nuestra relación con estos chicos siempre fue excelente, lo compartimos todo, forman parte del día a día. Recuerdo la mayoría de ellos que me pidieron una foto conmigo. Tengo un sobrino que juega en el sub-14 del Flamengo. Tenía amigos en el alojamiento. Él podría haber estado allí también. En fin, tenemos un vínculo y un respeto muy grande", explicó Diego Ribas.
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