Nuevo bochorno en el fútbol base. Esta vez fue en un partido de prebenjamines (niños de entre, 5, 6 y 7 años) entre el Juventud de Palmones y la Real Balompédica Linense, disputado en Los Barrios, donde hubo que lamentar la enésima agresión a un árbitro.
El protagonista, según testigos presenciales, fue el padre de uno de los niños del equipo visitante. El colegiado, de 17 años, recibió un golpe mientras los locales celebraban junto a su familia el triunfo en el césped.
La trifulca prosiguió, y mientras algunos pretendían calmar las aguas otros se sumaron a la pelea. La madre de uno de los jugadores locales resultó herida.
Tanto ella como el árbitro, menor de edad, sopesaron la idea de presentar denuncia.
La Policía y la Guardia Civil se personaron rápidamente en el campo, mientras los clubes mostraban su tristeza por lo sucedido.
"Desde la Real Balompédica Linense condenamos enérgicamente cualquier acto violento y nos ponemos a disposición de las autoridades para facilitar las investigaciones pertinentes", dijo el club.