Aficionados del Celtic se defienden de la forma que pueden. Tiran sillas y vasos mientras otro grupo se refugia en el interior de un pub.
Acaban de sufrir una emboscada de los ultras de la Lazio, que encapuchados y armados atacaban por sorpresa a los aficionados escoceses.
La trifulca no duró más de 5 minutos pero no sería hasta la llegada de las asistencias cuando todos se percataron de la gravedad de lo sucedido: dos aficionados del Celtic habían sido apuñalados.
Todo, como venganza a la imagen del partido de Glasgow en el tifo local con Mussolini colgado. Algo por lo que ahora la facción fascista de la afición de la Lazio ha querido cobrarse su particular vendetta.