En el entrenamiento de este lunes de la selección holandesa de fútbol se ha vivido una situación más que sorprendente. El seleccionador, Louis van Gaal, ha dirigido la sesión desde un carrito de golf que era conducido por uno de sus ayudantes.

El veterano técnico siguió toda la sesión matinal desde este vehículo, que fue moviéndose por el césped según sus jugadores realizaban los diferentes ejercicios programados.

El motivo de esta inesperada manera de entrenar fue que van Gaal había sufrido un percance con su bicicleta durante la pasada noche en plena concentración.

"Físicamente no estoy bien, tengo mucho dolor. Pero el cerebro funciona. Puedo hacer cualquier cosa. Hay recursos que están disponibles. Creo que el coaching es verbal. He hecho todo lo que normalmente hubiera hecho", ha expresado el entrenador holandés.