Parece que el periplo de Malcom en San Petersburgo no ha empezado de la mejor manera posible. En la cuarta jornada la Premier rusa, que enfrentaba al Zenit contra el Krasnodar, Malcom saltó al campo en la segunda parte para disputar los 18 minutos finales del encuentro. Al anunciarse la entrada del exjugador del FC Barcelona, los ultras del equipo ruso mostraron una pancarta con claras referencias racistas.

"Gracias a los líderes por su fidelidad a las tradiciones", rezaba irónicamente la pancarta en la 'Landskrona' -grada más radical-, en línea con un comunicado en el que destacaban que para ellos "la ausencia de jugadores negros es solo una tradición, no somos racistas".

Según informa el diario ruso 'Ria Novosti', el Zenit de San Petersburgo podría plantearse buscarle un nuevo destino en enero dada la desaprobación de la afición hacia los fichajes de jugadores de color. Estos hechos ya sucedieron con jugadores como Axel Witsel o Hulk, y vienen a darse tan solo tres días después de oficializarse el fichaje de Malcom por 40 millones de euros.

El club culé no perderá de vista la situación del brasileño, ya que según quedaba estipulado en el contrato de venta, la entidad de la Ciudad Condal obtendría un porcentaje de una futura venta del jugador.