Con un futbolista más, con Mamardashvili expulsado... y el Barça finalmente sí logró remontar al Valencia. Robert Lewandowski apareció en Montjuic para dejar los tres puntos en Barcelona. Tres goles. Y retrasó así, al menos una semana más, el título liguero del Real Madrid.

No es nada habitual ver a Ter Stegen y Mamardashvili, dos de los mejores porteros del campeonato, fallar. Y los dos lo hicieron en el primer acto. Uno regaló un gol, el otro vio la roja por tocar la pelota con la mano fuera de su área. Ese acto inicial finalizó con un intenso 1-2 a favor del Valencia... pero con un jugador menos.

Se adelantó el cuadro de Xavi Hernández, cuya continuidad en el banquillo se confirmó en la semana previa al choque. Fermín cabeceó como un 9 en el punto de penalti y colocó la pelota pegadita al palo. Respondería Hugo Duro tras el mencionado error de Ter Stegen.

Y el Valencia encontró el segundo en otro error defensivo. Esta vez de Ronald Araújo, que concedió un penalti absurdo al derribar a Peter Federico. No falló Hugo Duro, bigoleador de la noche.

Apenas tardó unos segundos el Barça en igualar el marcado. Fue con otro cabezazo. Esta vez de Robert Lewandowski. Tras una consulta del VAR por un posible fuera de juego de Fermín, los colegiados concedieron el gol y el encuentro volvía a estar empatado.

Lo intentó el Barça hasta el final, probando a Jaume Domenech casi en cada jugada. Lewandowski volvió a aparecer. Otra vez de córner. Esta vez en un rechace que cabeceó al fondo de la red. El tercero, golazo, con un disparo de falta imparable.

La remontada acabó llegando y el Barça pudo así alargar al menos una jornada más el título liguero del Real Madrid. En un final, por cierto, en el que la grada coreó el nombre de Xavi, que seguirá el curso que viene al frente del Barça.