A Lionel Messi bien le pueden pitar los oídos tras el Brasil - Argentina. El argentino, que marcó el único gol del partido entre las dos grandes selecciones de Sudamérica en el amistoso disputado en Arabia Saudí, mandó callar a Tite en pleno encuentro y no solo se llevó las críticas del seleccionador. Thiago Silva, central de la 'Verderamarelha', ha sido más tajante que su técnico.
"Quería mandar. Dio dos pelotazos y nada. discute con el árbitro y nada. Sigue riéndose. En situaciones así hay que dejar a un lado la admiración", comentó Silva.
El defensa fue mucho más allá. "Ya nos lo dicen en España. Hemos hablado con jugadores de LaLiga y es igual. Quiere controlar el juego y también las decisiones del árbitro. Busca forzarles a que le piten situaciones de falta peligrosa", afirma.
El brasileño dice que en Champions esto no es así: "Ahí los árbitros son más duros y no ves que quiera mandar tanto sobre ellos. Por admiración, hay árbitros que se ponen del lado de Messi y eso hay que dejarlo de lado".
Messi fue el protagonista del partido entre Brasil y Argentina. El 10 fue objeto de un penalti algo dudoso de Alex Sandro que falló ante Alisson, pero el rechazo le cayó al pie para batir al arquero brasileño y hacer el 0-1.
"Debería ser más respetuoso en estas jugadas", dijo Tite después de confirmar que le mandó callar en pleno partido.