El jugador del Tottenham Hotspur Heung-min Son aseguró que los últimos días "han sido muy duros", después de haber lesionado de gravedad al centrocampista portugués del Everton André Gomes. El surcoreano participó con dos tantos en la victoria 0-4 del Tottenham ante el Estrella Roja de Belgrado y en su primer gol lo celebró pidiendo perdón ante las cámaras.

Esto hizo referencia a lo ocurrido el pasado domingo en Goodison Park, cuando una entrada por detrás del coreano terminó con Gomes sufriendo una fractura de tobillo. "Han sido días muy duros", dijo Son, que se puso a llorar al ver la lesión de Gomes, a la cadena BT Sport. "Me he dado cuenta de lo afortunado que soy, por todo el apoyo que he recibido de los aficionados y de mis compañeros", explicó el asiático.

La acción fortuita le costó la tarjeta roja a Son, pero esta decisión ha sido anulada por la Federación inglesa de fútbol, por lo que el surcoreano estará listo para el encuentro de este fin de semana contra el Sheffield United.