Eran tres, pero ganar el Mundial no le valió a Jorge Vilda para coronarse como mejor entrenador en fútbol femenino. La UEFA entregó el premio a mejor entrenador a la neerlandesa Sarina Wiegman, al frente de una Inglaterra que perdió 1-0 ante la Roja en una final que supuso un hito histórico para las españolas. Por delante de Vilda y también del entrenador del FC Barcelona, Jonatan Giráldez, Wiegman recogió el premio convirtiéndose en la primera persona que se lleva este reconocimiento en más de una ocasión, después de hacerse con el mismo el año pasado, tras la victoria de Inglaterra en la Eurocopa de 2022.

Durante la ceremonia del sorteo de la fase de grupos de la Champions, celebrada en Mónaco, Wiegman subió al escenario para recoger su premio y mostrar el orgullo que sentía, en gran medida, por la "calidad" del equipo que entrena. Sin embargo, la neerlandesa, aprovechando el foco recibido, pidió "un momento" para dedicar unas palabras a la situación en España.

"Tengo que decir que esto es un poco diferente... Todos sabemos lo que está pasando con la Selección española", señaló en su intervención, donde dejó claro que le duele mucho esta situación "como entrenadora, como madre de dos hijas, como esposa y como ser humano". Pese a los avances, continuó, "todavía nos queda un largo camino en el fútbol femenino y en la sociedad", añadió, antes de dedicar su premio a la Roja, "un equipo que en el Mundial hizo un fútbol tan bueno que todo el mundo ha disfrutado".

"Este equipo se merece celebrar, pero también se merece ser escuchado y me gustaría darle un gran aplauso y que todos os unierais a mí", añadió, antes que el auditorio se uniera en un fuerte aplauso. Al finalizar la gala, el presidente interino de la RFEF, Pedro Rocha, se acercó a la neerlandesa para agradecer sus palabras y pedirle disculpas el nombre del fútbol español, tal y como ha podido saber el diario 'As'.