La diosa Fortuna le volvió a ser esquiva al FC Barcelona en el sorteo de la fase de grupos de la Champions League. Con el fantasma del 'descenso' a la Europa League de la pasada temporada aún sobrevolando, el conjunto de Xavi Hernández quedó encuadrado en el 'grupo de la muerte' junto al Bayern de Múnich, el Inter de Milán y el Viktoria Plzen.

Los azulgranas vuelven a verse las caras contra los bávaros después de tres derrotas muy dolorosas en las últimas tres temporadas (2-8 y un doble 3-0), pero con un equipo completamente renovado y con la ilusión por las nubes.

Pues bien, durante el sorteo, en el momento en el que se abrió la bola que encuadraba al Barça en el grupo del Bayern, las cámaras captaron a Oliver Kahn tratando de contener la risa.

La afición culé entendió este gesto como una falta de respeto y un insulto al cuadro blaugrana, por lo que el mítico exportero ha tenido que salir al paso para desmentir su supuesta soberbia.

En declaraciones a 'BILD', el ahora director general de los alemanes ha querido dejar claro que su reacción se debió al reencuentro que tendrá su equipo con Robert Lewandowski, que este verano cambió el Allianz Arena por el Camp Nou.

"Esta interpretación ha salido completamente de la nada. Robert Lewandowski nos dejó por el FC Barcelona hace apenas unas semanas, ahora el lote nos vuelve a unir en la fase de grupos de la Champions League", ha explicado.

"Sonreí ante tales rarezas del fútbol. Tengo el máximo respeto por Robert y el FC Barcelona, estos partidos serán una celebración para los aficionados de ambos equipos y los aficionados al fútbol en general". ha zanjado.