Las Federaciones de Fútbol de Inglaterra, Escocia e Irlanda del Norte han notificado a los entrenadores de equipos formativos que los niños menores de 11 años no podrán golpear el balón con la cabeza durante los entrenamientos, una medida adoptada para proteger la salud de los jóvenes.
En un comunicado conjunto, las tres federaciones han advertido a los técnicos que en las sesiones de entrenamiento "no debe haber remates de cabeza durante la fase de formación", una etapa que afecta a los niños de 11 años o menos. Sin embargo, no recomiendan prohibirlos en los partidos.
Además, el escrito establece nuevas normas para rangos de edad hasta los 18 años, donde los golpeos con la cabeza se mantienen como "baja prioridad", y señala que las reglas se irán modificando "gradualmente" de los 12 a los 18 años.
La decisión parte de un estudio de la Universidad de Glasgow, publicado en octubre de 2019, que afirmaba que los exfutbolistas profesionales tenían más probabilidades de morir de una enfermedad cerebral degenerativa y cinco veces más probabilidades de morir de Parkinson. En base a dicho estudio, las tres federaciones decretaron la medida para "mitigar cualquier riesgo potencial".
La medida aún no se aplicará en Gales, donde la Asociación de Fútbol todavía está estudiando la posibilidad de establecerla a finales de este año.