El sevillismo no ha olvidado a José Antonio Reyes. Hace unos días se le rendía homenaje en su pueblo, en Utrera. En aquel fatal accidente sólo hubo un superviviente, su primo Juan Manuel Calderón. 'Jugones' ha estado con él.
"Por desgracia perdí la ilusión por el fútbol. Del fútbol no quería saber nada", cuenta. Aquel accidente en junio de 2019 le hizo perder las ganas de pensar en el fútbol, pero eso ahora ha cambiado.
"Me llegó esto", dice (esto se refiere a entrenar en el club de El Palmar, en la segunda andaluza) y "le ha vuelto a inyectar esa pasión por el fútbol". Ha tardado más de dos años en poder volver a pisar el césped.
En aquel terrible accidente del 1 de junio de 2019 en el que sus ilusiones se pararan, Juanma intentó salvarlos. Las cicatrices aún le acompañan. Se quemó el 60% de su cuerpo. Él fue el único superviviente de aquel accidente, en el que perdieron la vida Reyes y otro primo.
Ahora el fútbol le ha vuelto a dar alegría. Y siempre con Reyes presente. Con ese tatuaje en su pierna izquierda. "Es mi ángel", dice, emocionado.