El Real Madrid es, de nuevo, supercampeón de España. Tras lograr el título en 2020 contra el Atlético, ahora los blancos han derrotado por 0-2 al Athletic en Riad para sumar su primer entorchado de 2022 y un nuevo título más para sus vitrinas.
Tuvieron que cambiar el guion los blancos. Y lo hicieron. Porque el Athletic no es el Barça. Porque los vascos, porque el equipo de Marcelino, prefiere dejar hacer. Prefirió dejar la bola al Real Madrid. Prefirió, viendo el estilo rápido de un Real con Vinicius y Rodrygo por bandas, evitar las contras.
Lo lograron, y los blancos no vieron cómo meter mano a un equipo al que acorralaban pero al que no podían morder. Al menos, hasta que llegó Luka Modric.
Golazo de Modric
Porque el croata, de 36 años, es de esos que no solo demuestran que la edad es solo un número sino que cuanto más tiempo pasa parece estar mejor. Qué clase. Qué talento. Qué completo es el mediocentro.
Crea, destruye, presiona, pasa, asiste... y marca. Marca golazos. Golazos como el anotado ante Unai Simón. En un partido en el que Casemiro tuvo las mejores opciones, él aprovechó su llegada de segunda línea para, con la diestra y con una gran rosca, batir al arquero del Athletic.
La sentencia de Benzema
Para obligar a los vascos a ser más agresivos. Y a buen seguro era esa su idea, pero nada más salir de vestuarios, penalti claro tras manos de Yeray y gol de Karim Benzema. Y si hay un equipo, actualmente, que se siente cómodo con el marcador a favor, es el Real Madrid.
Pero tanta comodidad a veces provoca que se caiga en los excesos. El Athletic se animó. Empezó a recuperar la bola más cerca del área de un equipo que cada vez estaba más atrás y que acabó con diez por roja a Militao. Porque el central dio con la mano al cuero en el área e hizo trabajar a Courtois
Courtois, galáctico
El belga detuvo el penalti a Raúl García con el pie y mantuvo la tranquilidad, al igual que el 0-2 para los suyos. Milagrosa pierna izquierda de Thibout, en un paradón que solo está al alcance de los mejores.
Con él, y con los goles de Modric y de Benzema, el Real Madrid sale campeón de Riad. O, mejor dicho, el Real Madrid sale supercampeón de RIad.