El Real Madrid ha aprovechado el primer 'match ball' que ha tenido en esta LaLiga. El equipo blanco, ante el Espanyol, logró sumar tres puntos para levantar, de esta manera, su 35º título de la competición de la regularidad en España a falta de todavía cuatro jornadas para el término del torneo.

Tenían que sumar al menos un punto. Un empate. Unas tablas en un partido de los denominados trampa. Trampa ya no solo por el rival y por el escenario, sino también por la cercanía que hay con el trascendental envite que tienen los blancos ante el Manchester City. Viendo la diferencia que han acumulado en LaLiga, podía tocar rotar.

Y se rotó. Benzema y Vinicius, esperando en el banquillo. Al igual que Toni Kroos. La defensa, con Casemiro junto a Vallejo más Lucas Vázquez y Marcelo. Modric, con Ceballos y Camavinga en medio. Arriba, Asensio, Mariano... y Rodrygo.

Primer doblete de Rodrygo en LaLiga

El brasileño se lo está ganando. Bien sea ganarse un sitio en el once titular o bien sea, sobre todo, tener un rol importante en el Real Madrid. En este tramo final de curso, sus actuaciones y goles están siendo claves, y está ganando en confianza. Y ya saben, el fútbol es, en muchas ocasiones, un estado de ánimo.

Ahora está que todo lo que agarra en el área lo enchufa. Antes del descanso, Rodrygo ya llevaba dos goles en su haber. Los dos que marcó el Real Madrid, un equipo que en los primeros 45 minutos ya dejó prácticamente visto para sentencia el partido y también el título. Aunque lo de LaLiga era cuestión de tiempo.

Asensio y Benzema completan la fiesta

Por si había que evitar una posible reacción espanyolista, Marco Asensio dejó el encuentro ya listo para el desenlace. El balear, en una rápida contra, definió con la derecha para batir así a Diego López y hacer que de esta manera el Santiago Bernabéu siguiese de fiesta.

Que viviese una fiesta. Se sumaron Benzema, que marcó el cuarto e Isco, que saltaron al verde cuando restaban 30 minutos. Y se mantuvo Marcelo, que fue ovacionado cada X tiempo por un estadio que sabe que el zurdo no estará el próximo curso con ellos. El brasileño es, directamente, historia del Real Madrid. El madridista lo sabe, y él también.

Y también saben que LaLiga es suya. Ya son 35, gracias a una temporada casi perfecta con el único borrón del 0-4 ante el Barça que tampoco tuvo mucha repercusión en el desenlace del título.

Una diferencia abismal

Son 18 puntos los que sacan al Barça, a expensas de lo que pase en el partido que juegan los culés esta jornada, pero deja a las claras la superioridad del Real Madrid durante este curso.

Ahora, con LaLiga en el bolsillo, toca sonreír y también pensar en la vuelta ante el Manchester City de las semifinales de la Champions League. Porque la temporada aún no ha terminado, y el reinado de Europa está en juego.